Canción sin dedicatoria..

Anoche busqué un motivo para pedirte perdón..
me encontré con cada una de las noches que llore en un rincón
cuando me atabas  con razones de qué era lo mejor
tu argumento para que yo aceptara que el amor libre es una buena opción..

Anoche busqué un motivo para decirte adiós..
me topé con cada lagrima que tus manos borraron de mi cara
con cada sonrisa que pintaste en las más oscuras versiones de mi vida
con unos labios que pronunciaron las palabras más honestas que escuché jamás

Hoy sólo busco  un motivo para hacerte feliz
no importa si conmigo o sin mi
la ilusión de volver a verte no ha abandonado un sólo día mi mente
he atravesado mil infiernos buscando el camino de vuelta a ti.

Mi error es callar cada una de las oraciones que pronuncio al infinito
invocando tu nombre en silencio,
buscando un destello de ti en cada persona que encuentro al pasar.
Lo peor es que te escribo un blog para que sepas lo que siento en realidad
y tu nunca lo has vuelto a visitar...

Maldita dulzura

Sabes cómo perderme
cómo encontrar el punto final
entre tus ojos de inocencia y tus manos sin defensa
me hundo en el olvido

Encuentro en el fondo del pozo
tus más oscuros secretos
con tus manos tomas mi cara
alejas mi vista de las cosas mundanas
me miras, penetrante, te adueñas de mi al instante
mi voluntad no existe más

Estrella fugaz

Me veo hundida en un útero de oscuridad

no encuentro la forma de escapar..

se dilatan mis pupilas, se seca mi saliva

una parte de mi se escapa para irte a buscar

Una lluvia de ceniza es lo que queda de mi fe

empapada de desilusión, corrompida 

la música del universo invade mi mente enferma

el infinito me llama, el viento me levanta

.. por fin puedo volar

Espero, te espero..

Si pudieras ver en qué me convierto
adivinarías que mi corazón está hambriento
se alimenta de goteras de realidad
si tu no vienes a visitar, prefiero no despertar

la madrugada es larga, el amanecer no me alcanza
la prisión de mis errores me desgasta
camino con voluntad a través de sus ventanas
para alcanzar el final de la veda de almendras y habas

te veo a la distancia, ahora sonríes y descansas
dudo en acercarme, prefiero admirarte a la distancia
no quiero romper tu halo de luz
no puedo perdonar que un día fui tu cruz

aun dudas que te quiero, no te culpo, es tu derecho
te arranqué las alegrías de vivir un día nuevo
del rencor he abortado mil te quieros y mis sueños
no merezco tu perdón.. pero aún así lo espero

Mañana, quizás.

Un moribundo paseando entre llamas

los pies me arden, la piel se desgarra,

siento el olor de mi esperanza esfumada

el dolor es insoportable, casi trascendental.

Pareciera que el fin está cerca

que ya nada queda por hacer..

el letargo de mi existencia podría desaparecer

las nubes de tormenta cargando la tempestad 

Un agujero en la pared, por el que miro a través

allá en la distancia no hay colores, no hay dolores

puedo cambiar de rostro y recuerdos del ayer

puedo crear un nuevo y colorido amanecer.

La muerte es el pensamiento recurrente que visita mi mente

parece que coquetea con mi mortalidad

mientras bailan al compás de mi pulso humano

apostando quién ganará el siguiente vals

LSD

Debí advertir que no estabas preparada
siempre cargas la mirada perdida
las palabras enredadas..
el corazón con rajaduras y muchas grietas encarceladas.
Debí huir cuando aún era libre
correr tan lejos hasta perderme de vista
nunca besarte y volverme adicta a tu amargura
el sabor de tus lagrimas es heroína en lo que queda de mi basura.

No tengo un diagnóstico de la enfermedad padezco
es como un cáncer carcomiendome los sesos
pero este cáncer me devora por completo
me transporta agonizante lejos de este mundo aberrante.
Inhalar tu piel es aceptar que me he hundido..
tus brazos son lazos que aprietan y revuelcan el infinito
aunque me estés matando, a la vez me das oxigeno
una obsesión como ninguna, el infierno es mi delirio.

 Debí saber que eras mi perdición
una adicción de la que no me rehabilito
no quiero siquiera saber si respiro o vomito
debí escuchar a mi intuición y pasar de largo en tu camino...

Un patrón en mi vida ha sido llegar tarde a todo
cada cita, cada fecha concertada,
siempre 3, 5, 10 minutos atrasada.

Ironía es que la  impuntualidad ahora se voltea
me mira escondida en una esquina
se ríe de mi.. me señala con un dedo y me enseña que perdí
que mis malos hábitos, de nuevo, me destruyen así.

Siempre pensé que al crecer las cosas irían tomando sentido y forma por sí solas.. que el camino se presentaría ante mi con señales e indicaciones.

¡nunca estuve tan equivocada!

Mas parece que me apagaron la luz.. y no sólo me toca encenderla. Me toca buscar herramientas, velas, lumbre, leña, TODO! nada, nada llega por sí solo. Todo nace de mis manos

...y no tengo idea por dónde empezar.